Apio 1/2
El apio pertenece a la familia de las Umbelíferas, también denominada Apiáceas.
Las hojas tienen un sabor muy intenso, acre y ligeramente amargo. El sabor del tallo es más suave y tiene cierto gusto anisado y una textura crujiente.
Un apio fresco de calidad es aquel de apariencia lustrosa, tallos o pecíolos gruesos, compactos, firmes, crujientes y de color verde claro; con las hojas verdes, frescas o levemente marchitas.
A pesar de que el apio no es una fuente importante de energía, su consumo resulta saludable y refrescante por su contenido en agua, sales minerales y vitaminas diversas. Por tanto, se puede considerar al apio como un alimento regulador por excelencia. El potasio, muy presente en el apio, es un mineral necesario para la transmisión y generación del impulso nervioso y para la actividad muscular normal.
Existen dos épocas de siembra en función de sus dos ciclos productivos, invierno y primavera. Durante estos meses el apio está de temporada, aunque se puede encontrar en el mercado todo el año.
Valor nutricional por cada 100 g
Energía 42 kcal 176 kJ
Carbohidratos 9.2 g
Grasas 0.3 g
Proteínas 1.5 g
Agua 88 g